Días atrás Claudio Lozano denuncio que la Consultora Arcadía, vinculada al Ministro
Boudou y al funcionario y operador kirchnerista Juan Carlos Mazzón, era la
encargada de llevar adelante las negociaciones entre el gobierno y los bancos
-entre ellos el Barclays- para el canje de la deuda. Dicha denuncia sólidamente
sustentada, llevó a que la consultora tuviera que blanquear su papel en las
negociaciones y denominara "buenos contactos" con el Ministro y otros
funcionarios a lo que a ojos vista era tráfico de influencias.
La respuesta del oficialismo no se hizo esperar y montó
toda una provocación con la detención de Roberto Larrosa, asesor de Lozano, el
día viernes en el Ministerio de Economía, pretendiéndolo vincular con espionaje
en dicho lugar. Desvergonzadamente el Ministro Boudou, que nada ha explicado aún de sus vínculos con la Consultora Arcadía, aparece en conferencia de prensa involucrando no solo a Larrosa y Lozano con el supuesto espionaje, sino también
a Pino Solanas y Victoria Donda.
Despreciables métodos impropios de una democracia, los que utiliza este gobierno para esconder lo que debería explicar a la ciudadanía, buscando ensuciar a sus opositores para sacarse el sayo de sus turbios manejos.
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